Montado en rayos de soles
al alba,
acudo quedo en albores
al jardín,
por ver despertarse las flores
a la luz,
para oír sus risas de colores,
y sentir
el estallar de mil corazones
en su voz,
aspirar su belleza y olores
para mi,
que escondido acaricio esas flores
con mi voz.
La caricia de una flor desde unas manos que se sumergen en la delicadeza, mientras la fragancia de su olor perfuma los rincones del alba.
Un beso.