Vestía la ciudad sus luces de fiesta,
en el campo abril pintaba colores,
ardía impaciente mi adolescencia,
llenos los ojos de primeros amores.
Quemaba el aire a mi alrededor
por trazar las curvas de su cintura,
por llenar mi piel de sus ojos verdes,
por navegar sus labios bajo la luna.
Surcaban mis sueños sus rizos negros,
mi aliento se ahogaba bajo sus olas,
mi cuerpo entero estallaba en besos,
ardían mis ojos ante su boca.
La suave luz de sus ojos vino,
a tomar en su regazo mi corazón,
su mano en mi piel me lanzó al vacío,
sus labios en los míos el tiempo paró.
Mi alma, mi cuerpo, mi ser flotaba,
el cielo, pequeño se me quedó,
con sus tiernos besos forjó mis alas
y de polvo de hadas me las cubrió.
La ciudad, el tiempo, abril, la fiesta,
ya nada existía, sólo ella y yo,
su sabor, su piel, su luz, su anhelo,
mi alegría, mis sueños y mi pasión.
El tiempo, después, siguió su camino,
mas lo que hoy soy allí se gestó,
forjó con sus besos un universo,
mis alas, mi cielo, mi luz, mi amor,
llenó de estrellas mi firmamento,
y con cada beso las encendió.
Surcando mi cielo, en cada verso,
en la estela entre un sueño y la luz del sol,
arden aún las brasas del primer beso,
grabadas a fuego en mi corazón.
Yo, que me dejo los puntos y las letras en cada alma escrita, no he sabido, por no intentarlo, escribir poesía. Versificar, vamos, sé que no es lo mío. Que no hago otra cosa que leer y releer a González, a Prado, a Hierro, a García Montero, a otros etecés. Así que no sé si lo sabes, pero bueno, he escrito dos poemas en toda mi vida, en los dos últimos meses. Y sé que no doy para más. O sí, doy lo justo para llegar hasta tu legado escrito, estricto, y presente.
Te dejo la dirección de mi otro sitio de letras, para esos poemas que están, para los que puede que estén, y para escribir cosas pequeñas del día a día, noche a noche.
http://www.cafetario.wordpress.com
Es un verdadero placer encontrarme con tus letras, aquí, con tus comentarios allí.
Un abrazo, y mis felicitaciones más sinceras.
Mario
Vaya… el otoño te hace más poeta… y más dulce si eso es posible….
Precioso Abril!!
“arden aún las brasas del primer beso,
grabadas a fuego en mi corazón”
Me encanto esta parte, eriza la piel pensar que alguien te recuerde así..
Beso poeta.
Te agradezco, Mario, tus palabras de corazón, y antes de ir a visitar tu café déjame decirte que como te lances a versificar con la mitad de acierto que en tus textos, el resto lo vamos a tener difícil. Y sabes que no es una afirmación gratuíta; ya he dicho en más de una ocasión que tus escritos me parecen de una grandísima calidad; las formas perfectas, tu expresión, sentir cómo eres capaz de transportarme en primera persona hasta las vivencias que dejan los puntos y las letras de tu alma.
Déjame contarte un secreto. No conozco a los que mencionas. He leído poesía, claro, pero no demasiada, y mucha menos me ha tocado hasta el punto de hacer reír a mi corazón. Estoy seguro de que todos deben ser fantásticos, tanto unos como otros, pero sólo me hace feliz la poesía que me hace volar, sentir, y eso es algo totalmente subjetivo y que en absoluto pretende calificar esas poesías, ya me guardaré bien de ello.
Un fuerte abrazo, y gracias por venir por aquí.
Lucía…, Lucía y el mar, que tu risa navega sin fin.
Sabes? Nunca la olvidaré, jamás, y así se lo aseguré. En tantos años, el tiempo ha cubierto de bruma muchas cosas, pero nunca podrá borrar aquello grabado con el fuego de los más fuertes sentimientos, y pocas cosas hay como el primer y tan deseado beso.
Ignoro si ella lo recordará siquiera, pero eso no me importa, lo que importa es lo que sentí, y lo que siento cuando el mar de mis más vivos recuerdos me baña con sus olas y su espuma cosquillea entre mis sueños.
Ella me permitió descubrir, aún sin ser plenamente consciente, que era capaz de plasmar por escrito de una forma única y vibrante, pura, cristalina, mis sentimientos y mis vivencias, y no fue sino hace muy pocos años que tomé conciencia de nuevo de ello; enriquecido con el tiempo, como el buen vino en barricas de roble.
Un beso muy grande.
Angel, hermoso mío, que es una belleza tu poesía. El primer beso……… Qué recuerdos, cuanta ternura, cuanta inocencia encierra ese primer beso, tanta candidéz……. Ojalá cada vez que hiciésemos algo «importante» en nuestra vida por primera vez, supiésemos de antemano lo que dejará impregnado en nuestro futuro, para darle la relevancia que verdaderamente conlleva ese momento.
Como todo lo que escribes, bello, bello
Un besazo grande pa´ti y un abrazote:)
Hola Zully !!
Tus visitas son como el olor a tierra fresca tras la lluvia, una auténtica gozada 😀
Puede que la inocencia de la juventud, la candidez, vayan desapareciendo, pero el recuerdo de sus efectos perdurará siempre.
Un abrazote fuerte y un besazo 😀
Me encanta volver a leerte…siempre dándonos alas de «ángel» para hacernos volar.
Chica-T, sabes que aquí tienes una parada de taxi especial para ti. No se si encontrarás clientes que llevar en él, pero sí que tendré preparado para ti un café para acompañar si gustas de la lectura de este sitio.
Un beso.
UnAngel me parece de una delicada y tierna belleza este poema, en el que el primer beso te quema, te llena, te envuelve, te elevó al cielo… me parece sumamente tan dulce y tierno poema, tan bien plasmado, como creo pocas personas sabrían plasmar tan bien como lo has hecho tú, fíjate que ni siquiera tengo el atrevimiento de dejarte unos versos de la inspiración que me surgió tu poema, pero sí te dejo un fuerte aplauso y un gran beso.
María, gracias por tus palabras, y sabes que puedes dejar en este espacio aquello que se te antoje, y para mi será un placer recibirlo.
Un beso.
Hermoso tu poema Angel…y conmovedor, hasta el fondo mismo del corazón.
No hace ni 24 horas, no sé a santo de qué, me dió por recordar a Maria del Mar, mi primer amor infantil…Yo tiraba de sus coletas (una a cada lado) y ella me sonreía complacida por lo que, acertadamente, interpretaba como una clara muestra de afecto por mi parte…
Si la echaban de clase (algo en aquella época, gravísimo…que en su caso sucedía con cierta frecuencia, quizá no por mal comportamiento sino como una especie de venganza porque sus padres, por dificultades económicas serias…tenían varias mensualidades del colegio sin abonar) yo me inventaba siempre alguna manera «suave» de que me echaran también y así poder acompañarla.
Su cabeza apoyada en mis hombros, los dos apretados el uno junto al otro, sentados en un frío y duro banco de piedra en el patio, en el invierno de un colegio de Madrid, y el silencio solidario que compartíamos…es algo que no he podido olvidar jamás…Nunca hubo un beso en los labios, peo sí uno en la mejilla…de agradecimiento y, en cierto modo, de despedida…Desapareció junto con su familia; me preguntaron…¡no! me interrogaron, para intentar localizarla…y yo, yo no sabía nada, nada, nada mas allá de que yo amaba a esa niña…
Después vinieron otras…si, pero ya no fue igual…después la vida siguió, si, pero ya no fue lo mismo…después me enamoré, si, apasionadamente -no sé enamorarme de otra manera- pero a ella…jamás la olvidé…
No es verdad que un amor se olvida con otro. Creo mas bien lo que dice la canción de La Oreja de Van Gogh «…y es que empiezo a pensar que el amor verdadero es tan sólo el primero, y es que empiezo a sospechar que los demás, son sólo para olvidar…»
http://www.youtube.com/watch?v=nYnLVWXmRm8&ob=av2n
Leer tus poemas siempre me sume en un estado de comunión contigo…y sobre todo, amigo, conmigo mismo. Te leo y mi corazón se hace mas grande…quizá porque se siente un poco menos solo y un poco mas comprendido…
Doy las gracias por esa facultad tuya tan hermosa, hermano de Alma, doy las gracias porque la tienes…y porque eres tan inmensamente generoso que la compartes sin miedos…
¡Un fuerte abrazo desde el Alma!
Ananda
Cuando abrí este sitio, con la intención de pintarlo con retazos de mi alma, lo hice con cierto temor ante la posibilidad de que el frío exterior ateriese mi piel expuesta. Sin embargo, pronto constaté el acierto de haber dado ese paso, pues no he hecho sino sumar y sumar, crecer y crecer, de una forma que no podía ni imaginar, ante el calor de la gente que como tú en tu precioso comentario, amigo Ananda, me irradiáis con tal afecto y amor que mi corazón no puede sino dar saltos de alegría.
Por cada latido de mi alma aquí expuesto, ésta se he hecho mucho más grande en lo que he recibido, y a mi me falta comprensión para abarcar lo que eso supone para mi, y lo inmensamente feliz que me hace.
Me hace temblar el frío en el patio, a la par que me quema la pureza del amor de esos dos niños frente al invierno, y frente al resto del mundo, sentados en un frío banco, ante mis ojos, que tu has llevado a un maravilloso rincón de tu alma.
Ciertamente un amor jamás hace olvidar otro. Todo amor suma, siempre suma, y queda ahí, haciéndonos, como no puede ser de otra manera, más grandes. Lo que deseamos olvidar es el dolor, dolor que nace en nuestra errónea percepción y sus consecuencias.
Soy muy afortunado de que estés ahí hermano, y ni siquiera se cuanto.
Un fuerte abrazo!
Pues yo soy uno de los que se alegran inmensamente de que te despojaras del temor a ser un «corazón tendido al sol»
Y la sensación de crecimiento interior es recíproca, te lo aseguro Angel. No es fácil encontrar seres como tú, tan fieles y fiables y generosos. Así que déjame saborear de nuevo tu poesía, sabiendo que la ha escrito alguien que no se expone al sol, y a la lluvia, y a los rayos y truenos, si primero no se ha dejado achicharrar o temblar de frío por el clima siempre voluble de la vida.
Es un placer leerte. Mira a Chica-T. Después de tanto tiempo, ahí la tienes, de incondicional seguidora. Me alegro mucho.
Un abrazo, Angel
Qué privilegio es tener, no sólo como lector, sino además, como amigo, a alguien como tu Luis.
Es un bellísimo sentimiento tener la certeza de que lo que escribo os hace vibrar en sintonía conmigo y que, además, saboreáis ese momento como se saborea un helado en una calurosa tarde de agosto.
Muchas gracias Luis, un gran abrazo.