Saltar del cielo sin estrellarme.
Cielo en el que me has puesto tu.
¿Cómo hacerlo, sin destrozarme?
si no soy magia, si no soy luz.
-Valiente ángel, con tus lamentos!
Querer brillar, querer ser luz!.
-Disculpa entonces mi atrevimiento,
Morfeo, quién culpable, sino tú.
-Ordena pues, que ya no sueñe.
En tu rio el olvido, sumérgeme
-No puedo, pues tu ansia es fuerte.
-Pues ansia por soñar, ya ves, tendré.
Mas que hará ella, al despertar,
y ver que simple mortal yo soy.
¿Qué ojos me querrán mirar?
despojado de alas, pasión y voz.
-De alas quizás, mas de pasión no.
Y aún con voz trémula podrás brillar.
-Nunca brillé lejos de tu reino.
Cumple tu parte. Ven y hazme soñar.
Vaya.. no conocía este blog, y me quede si palabra a leerte.
Eres poeta soñador, romántico, me encanta este poema.
“-Nunca brillé lejos de tu reino.
Cumple tu parte. Ven y hazme soñar”.
Me encanta!! Precioso de verdad.
Besos. Y felicidades.
Hola Lucía.
Voy a arriesgarme a suponer que eres la Lucía que conozco de tu blog, y que has llegado hasta aquí siguiendo el rastro de miguitas de pan. Si es así, me alegro enormemente, y aún más de que te guste lo que lees.
Lo que es precioso de verdad es constatar que eres capaz de transportar lo que sientes al corazón de otra persona gracias a la magia de las palabras, y lograr que esa persona vibre en sintonía con tus propios sentimientos, como una conversación entre dos corazones.
Eso es lo que me parece maravilloso y es lo que me lleva a colgar este espacio, con mis sueños e ilusiones, que sólo lleva unos días abierto.
Un beso y gracias por tus palabras.
Si soy Lucia M. perdona por no poner la M.
Si llegue aquí a través de esas miguitas de ternura…
Precioso lo que escribiste a mi comentario.
Lo dicho eres un romántico poeta.
Gracias y besos para ti. Feliz noche.
Tocar su cielo, desde la magia, a los sueños, desde la locura, al cielo…
Un beso.